2.09.2012

-¿Acaso no te das cuenta? He perdido.
+¿Por qué?, ¿no perdía el que se enamorara antes?
-Sí, exacto. Y he perdido en toda regla.
+Me sorprendes.
-No digas tonterías, sabíamos que tarde o temprano pasaría.
Que me acabaría enamorando de tí, de tus ojos, de tu sonrisa, de tu simpatía, de tus locuras, de la manera sutil en la que me demuestras que te importo. De todo, de cada pequeño y absurdo gesto.
+Sé lo que sientes, y permíteme decirte no has perdido.
Es un empate.

2 comentarios: